Asesinan a policía municipal en Santa María Coronango; deja tres hijos huérfanos
El sujeto que asesinó a Juan Carlos, un policía municipal de 36 años de Santa María Coronango, y que deja a tres hijos huérfanos, estaba acusado de intento de feminicidio. El atacante llegó al barrio de San Antonio a bordo de un automóvil compacto, el cual fue asegurado por las autoridades ministeriales, quienes concluyeron las diligencias casi 14 horas después del incidente.
La Fiscalía de Puebla reveló que el agresor, quien también perdió la vida en el enfrentamiento con el agente municipal, era el dueño del inmueble que Juan Carlos resguardaba, el cual estaba bajo investigación por el delito de intento de feminicidio. Según fuentes policiales, el atacante, de aproximadamente 40 años, llegó alrededor de las 4:30 a.m. del jueves en un automóvil plateado, que dejó cerca de la capilla de la Virgen de Guadalupe. Se internó en los terrenos baldíos hasta llegar a su propiedad, donde encontró al oficial vigilando el lugar.
El vehículo oficial fue impactado por al menos tres balas, con orificios visibles en la carrocería y manchas de sangre. Una bala alcanzó al agente en el pecho, y, al repeler la agresión, Juan Carlos disparó y mató al atacante de un balazo en la cabeza.
Ambos vehículos, la patrulla municipal y el automóvil del agresor, fueron sellados y retirados por grúas. A las 17:30 horas, peritos y agentes ministeriales concluyeron las investigaciones, retirando los acordonamientos en las calles cercanas.
En la comunidad, los residentes no reconocen al atacante ni el caso de intento de feminicidio. Sin embargo, expresaron sentirse inseguros por hechos como desapariciones y el tráfico de drogas en la zona. La Fiscalía de Puebla aseguró que agotará todas las líneas de investigación para esclarecer el caso, registrado en la carpeta número FGEP/CDI/FIM/POPULAR-I/000210/2025.
Por su parte, policías cercanos a Juan Carlos, que pidieron anonimato por razones de seguridad, señalaron que la patrulla en la que el oficial se encontraba no estaba operativa y solo estaba estacionada para simular una vigilancia continua. Además, acusaron que el chaleco antibalas del policía no tenía placa de metal, lo que permitió que la bala que recibió en el pecho lo atravesara. Hicieron un llamado al gobernador Alejandro Armenta Mier para que revise las condiciones de los policías municipales de Coronango, quienes, según denuncian, no contarían con seguro de vida.