Cruz Azul y Monterrey aburren con empate sin goles en la ida de cuartos de final.
La racha de victorias de Cruz Azul terminó en el duelo de Ida de los Cuartos de Final.La Máquina no aprovechó su condición de local y empató sin goles (0-0) ante Monterrey, equipo que se plantó en la cancha del estadio Azteca dispuesto a no regresar a la Sultana del Norte con un marcador adverso.
El equipo del Potro Gutiérrez generó un par de jugadas de peligro sobre el arco de Esteban Andrada, las cuales Nacho Rivero ni Michael Estrada lograron capitalizarlas. En la parte defensiva, los celestes mostraron solvencia, pues el Cata Domínguez sacó de la línea un balón que los norteños cantaban como gol.
La polémica no pudo faltar en este duelo, ya que el nazareno no marcó dos jugadas que parecían penalti, una de cada bando. El duelo de vuelta se disputará el próximo sábado en el Gigante de Hierro en punto de las 18:06, encuentro en el que La Máquina no tendrá que especular y deberá salir a ganar desde el primer minuto, pues cualquier empate les da el pase a las semifinales a Rayados.
Nacho Rivero, la figura de Cruz Azul, el hombre que se ha echado a la espalda a La Máquina, perdonó a Rayados. El reloj marcó el minuto 35 cuando el uruguayo se encontró un balón completamente solo dentro del área regia. Rivero se acomodó y sacó un zapatazo que estremeció las redes, situación que emocionó a la fanaticada celeste, quien gritó ¡gol!, pero la redonda golpeó la red por fuera.
Al ver el grave error de Nacho, comenzaron a exigir una pena máxima, pues Erick Aguirre se barrió y contactó al celeste, pero el colegiado decidió no marcar falta y continuar con la jugada.
Esta no fue la única polémica en el encuentro, pues Víctor Cáceres, nazareno del cotejo decidió no marcar una falta que parecía clara en el área cementera. Chuy Corona salió a cortar un centro y se llevó puesto a Luis Romo, una jugada que sin duda estuvo en el límite del reglamento, ya que el arquero no tocó la pelota. A pesar de no señalar penalti, el esférico tomó rumbo a la meta celeste, pero el Cata Domínguez se barrió para evitar la caída de su marco.
El primer tiempo culminó con pocas, pero sustanciosas llegadas de peligro en ambas porterías, debido a que el duelo se enfocó en el medio campo.
Nada para nadie
Cruz Azul volvió a perdonar… En un segundo tiempo donde Rayados comenzó a cerrarle los espacios a La Máquina, Michel Estrada logró ganarle la espalda a la zaga de Monterrey, por lo que Antuna le metió un pase filtrado al ecuatoriano, quien logró quitarse Esteban Andrada y con poca opción de disparo, pues estaba pegado a la línea de fondo, sacó un disparo que de nueva cuenta se estrelló en la red por fuera.
El gol se le negaba a los celestes, pues Nacho Rivero cobró un tiro libre directo en los linderos del área y estrelló su disparo en el travesaño.
En los minutos finales, Cruz Azul buscó volcarse al frente en busca de un gol que les diera la ventaja en el global, pero los norteños estuvieron bien plantados en el fondo, por lo que todo quedó en algunos suspiros.