🎬 Adrián Di Monte, el segundo expulsado de La Casa de los Famosos México 2025: así lo eliminaron y lo emotivo de su salida
Adrián Di Monte se convirtió este domingo 10 de agosto de 2025 en el segundo eliminado de La Casa de los Famosos México 2025, tras recibir la menor cantidad de votos del público entre los nominados que incluían a Mar Contreras, Alexis Ayala y Priscila Valverde; fue Galilea Montijo quien anunció su nombre rodeado de tensión y nerviosismo entre los habitantes. Al subir a la icónica silla giratoria, el actor enfrentó el momento más difícil: “por decisión del público, el habitante que abandona … eres tú Adrián Di Monte”, declaró la conductora antes de que saliera de la casa de los famosos.
La eliminación tomó por sorpresa al llamado “cuarto Noche”; sus compañeros no anticipaban su salida y el ambiente dentro del reality cambió de inmediato, marcando un antes y un después para la dinámica del programa. Lejos de pasar desapercibida, su despedida generó un momento viral cuando cometió un error de protocolo, que se convirtió en el centro de atención en redes sociales —inundadas de memes, capturas y comentarios humorísticos— lo que aumentó aún más la cobertura mediática del reality.
Tras salir del programa, Adrián vivió uno de los momentos más conmovedores de la noche: en la Post Gala, fue recibido por su esposa, a quien abrazó visiblemente emocionado y quebrado en llanto. “La Casa de los Famosos México es el proyecto más difícil que he hecho en mi vida… gracias público, gracias México”, expresó entre lágrimas mientras se fundía en un abrazo lleno de emoción.
Desde el confesionario, el actor compartió que la experiencia le implicó un gran reto emocional, particularmente por estar recién casado y sentirse lejos de su esposa. Además, expresó gratitud hacia el público mexicano y confesó haber sentido empatía incluso por quienes votaron para que se fuera, pues “escuchaba las canciones de Pedro Infante y Jorge Negrete… como decía Chavela Vargas, un mexicano nace donde se le pega la gana y yo nací en Cuba”.
La salida de Di Monte no solo intensifica la competencia dentro de la casa, sino que también enciende redes sociales y augura nuevas estrategias para los participantes restantes. Su partida deja un vacío emocional y competitivo que ya se siente en el ambiente del reality y entre la audiencia, mientras el público sigue de cerca cada giro dramático de esta temporada.
