«Felipe Carpy: Un Activista Esperanzador Tras la Aprobación de la Ley de Víctimas»
A dos semanas de la aprobación en el Congreso del Estado de la conocida «Ley Carpy», que garantizará atención médica y psicológica permanente a todas las víctimas de delitos en Puebla, el activista Felipe Carpinteiro, más conocido como “Felipe Carpy”, espera que estas modificaciones a la Ley de Víctimas del Estado no sean solo palabras vacías. Aspira a que su historia sirva de inspiración para más personas y contribuya a salvar vidas, como ocurrió con una niña que necesitaba un trasplante de corazón y no era escuchada por las autoridades.
En una entrevista para El Sol de Puebla, el animalista de 32 años expresó su orgullo y felicidad, ya que, a partir de ahora, quienes sean víctimas de delitos y sufran secuelas de por vida como él recibirán protección y apoyo psicológico, emocional y económico. Actualmente, él enfrenta gastos mensuales que oscilan entre los 30 y 35 mil pesos para su tratamiento, debido a que quedó en silla de ruedas tras una agresión en un asalto en 2022, lo que le ocasionó otros problemas de salud.
“Desgraciadamente, las leyes no son retroactivas, lo que significa que a mí no me beneficiarán, pero me siento honrado de que, de alguna manera, todo el sufrimiento, el calvario que he vivido, mis lágrimas y cicatrices servirán para ayudar a futuras víctimas”, destacó Carpinteiro. Además, aplaudió que ahora se le dé importancia al aspecto psicológico, ya que, en casos como el suyo, donde la vida cambia de repente, es fundamental contar con apoyo emocional para enfrentar situaciones cotidianas.
Felipe confesó que, aunque a veces se siente perdido y se cuestiona el sentido de seguir viviendo, ha llegado a comprender que su misión es ayudar a otros. Recientemente, fue el vínculo que ayudó a una niña con problemas cardíacos que necesitaba ser operada y no era escuchada por las autoridades. “Apenas un día antes de que se aprobaran las reformas inspiradas en mi situación, la madre de la niña me escribió y me agradeció, diciéndome: ‘mi hija está viva gracias a ti’. Ese mensaje me llenó de alegría, porque de alguna manera, mi situación es útil para otros”, compartió.
El activista también señaló que esta ley es un recordatorio de que cuando se alza la voz, se puede ser escuchado y lograr cambios sin perjudicar a los demás. A pesar del temor de que la propuesta para ayudar a las víctimas no fuera aprobada, Felipe celebró el éxito de la iniciativa. “Casi al final de la administración, con la ayuda de los diputados Oswaldo Jiménez López y Miguel Espinosa de los Monteros, logramos que se aprobara una ley que parecía casi imposible. Estoy muy agradecido con ellos por haber fijado su atención en mi caso. Esperamos que no haya más víctimas, aunque soy consciente de la creciente inseguridad en nuestro país”, concluyó el joven.
Ahora, Felipe «Carpy» se enfoca en esperar que la ley se implemente y en seguir aportando a la sociedad desde su lugar.
